Que es el Chamanismo?

Al día de hoy, los que saben de Chamanismo y que en general son los Antropólogos dicen que “El Chamanismo” se refiere a una clase de creencias y prácticas tradicionales similares al animismo que aseguran la capacidad de diagnosticar y de curar el sufrimiento del ser humano y, en algunas sociedades, la capacidad de causarlo. Los chamanes creen lograrlo atravesando la línea con el mundo de los espíritus y formando una relación especial con ellos. Aseguran tener la capacidad de controlar el tiempo, profetizar, interpretar los sueños, usar la proyección astral y viajar a los mundos superior e inferior. Las tradiciones de chamanismo han existido en todo el mundo desde épocas prehistóricas.

Además hay que agregar que ese tan usado término al parecer proviene de Siberia, según Manuel Almendro en su libro “Chamanismo” dice que es una palabra “tungu” y claro que ese autor se refiere a otros autores y estos a su
vez se refieren a otros autores más y al final todo saben muy bien de lo que hablan en su jerga de “Antropo-lexico” de “Antropo” que viene de antropólogo y “léxico” de los términos sesudos y cultos que utilizan para explicar cosas que al final solo han estudiado en los libros y comprendido desde su Universo Universitario.

Con esto no quiero de ninguna manera denostar a los Antropólogos, yo mismo estoy escribiendo un libro con una muy querida amiga que es Antropóloga, sino es solo para hacer una distinción de la gente Culta que sabe desde el punto de vista intelectual y la gente que simple y sencillamente lo hace.

En el medio encontré un magnífico antropólogo Francés que se llama Jeremy Narby del cual recomiendo ampliamente sus libros, ya que tiene una verdadera conexión con la medicina y con el espíritu; en una conferencia
que el dio por acá en Suiza, dio una definición de chamanismo que ojala la hubiera anotado, en ese entonces no sabía que escribiría estas líneas a ese respecto, pero al final a mi me pareció su definición un poco complicada, pero bastante acertada, sin embargo para mi muy particular punto de vista, todo lo que sea muy complicado es terriblemente poco práctico y yo soy terriblemente pragmático.

De cualquier forma por más acertadas o peregrinas que puedan parecer las descripciones del Chamanismo, hay un grave problema, mientras más lo quieren describir mas vago queda el término, ya que ese término describiría
a una persona o a un Chaman, dejando de lado al resto de las tradiciones “Chamanicas”, describiendo solo un linaje o una sola vía, cuando en realidad cada “Chamán” “Hombre Medicina” “Curandero” “Brujo” “Ticitil” Xmen o cualquier otra denominación que se les quiera dar, termina siendo subjetiva y basada en solo un cierto tipo de prácticas tradicionales.

Pectoral de roi chaman de forme solaire en or martelé, décor de divinités s’imbriquant les unes dans les autres.  Tembladera, Pérou, 400-200 av. J.-C. Collection CENTRE D’ÉTUDES DES CULTURES

Esto significa básicamente que hay tantos “Chamanismos” igual a la misma cantidad de “Chamanes”, ya que sus prácticas no son iguales y difieren mucho unas prácticas de otras.

Claro que hay elementos comunes, uno de ellos es el tambor, la maraca, las plumas, las pieles de animales, las piedras, los objetos sagrados que sostienen o retienen energía, los cantos, las plegarias, las cuatro direcciones como mínimo, los cuatro elementos, los estados modificados de la conciencia y el contacto con el mundo invisible, todo esto se cita de manera enunciativa pero no exhaustiva y mucho menos restrictiva.

Fuera de estos elementos, hay miles de fórmulas distintas para hacer el Chamanismo, como de Chamanes a practicarlo, ya que una de las “reglas” no dichas y no escritas es que “cada quien tiene que labrar su camino propio”.

Otra cosa que es un elemento muy común en las tradiciones Chamanicas, es que el conocimiento viene a la manera de la antigua escuela, con “sangre, sudor y lágrimas” es decir mediante alguna manera de sufrimiento.

Esto es verdaderamente inconveniente pero cierto, ya que las personas que se acercan al “Chamanismo” o a un “Chaman” es porque ha buscado soluciones mediante otras vías y no las ha encontrado y solo en ese estado de sufrimiento abre el corazón y la mente para encontrar la solución a sus problemas o al menos una guía que le muestre el camino de salida.

Algo que es importante aclarar es que el “Chamanismo” no es sencillo y no está al acomodo de las personas, es decir “El Chamanismo” va a sacar lo peor de nosotros para curarnos y generalmente nos pondrá enfrente de nuestros propios demonios para enfrentarlos.

Es curioso cuando se dice que el Chamanismo viene de la “prehistoria” y no quiero entrar en discusiones semánticas acerca de ese obtuso término “prehistoria”, pero es para aclarar solamente que el “Chamanismo” viene desde el mismo inicio del hombre en la tierra, por lo que en realidad no estamos descubriendo el hilo negro.

Esto es muy sencillo de explicar, ya que el “Chamanismo” más que ser un conjunto de “creencias” es un conjunto de “experiencias que nos llevan a la sabiduría”, ya que el “Chamanismo” es eminentemente “pragmático” y no puede ser de otra manera, ya que lo que sirve se utiliza y lo que deja de servir o ya no sirve simple y sencillamente se desecha y a esto me refiero directamente al “conocimiento”, ya que de nada sirve tener un conjunto de “conocimientos” que no sirven para nada.

Por eso me parece tan curioso que cuando alguien alguna vez me dijo “los chamanes son esos que cantan “hu hu hu” y danzan alrededor de una fogata” me pareció muy chistoso como lo dijo, así que yo ya no pude argüir nada mas debido a mis carcajadas, pero hay que entender que el Chamanismo es una “Ciencia Espiritual”.

Y con esto no solo me refiero al mundo de los “Espíritus” sino a todo tipo de manifestaciones sutiles o tangibles de todo lo que es la energía.

También me gustaría aclarar que por mundo de los “Espíritus” se debe entender no solamente a ese término conflictivo de “espíritu” que la gente conoce como de “almas en pena que deambulan por el mundo”, sino al “Espíritu” de todas las “cosas” es decir a la causa subyacente de todo.

“El Chamanismo” busca la sabiduría que está escondida en cada cosa, en cada experiencia de la vida y desgraciadamente aprendemos más de las malas experiencias que de las buenas, pero precisamente es ahí el “arte
Chamánico” de la vida, pararse frente a una mala experiencia en lugar de quejarse o llorar o mejor dicho después de quejarse y llorar preguntarse “que es lo que me está enseñando el universo?”, “que hay mal en mi, que los demás reaccionan así conmigo? Que hay de mal en mi, que las cosas salieron de esta manera? Que hay mal en mi o qué es lo que me está enseñado esta enfermedad? Que es lo que me quiere decir el Universo con esta situación?

La idea es integrar los elementos que conforman un problema y posteriormente evitar de hacer juicios respecto a las soluciones, evitar buscar las soluciones sino mas bien preguntarse “que es lo que me está enseñando esta situación? Que enseñanza debo de sacar de esta situación?

De esta manera no se está tratando de obtener soluciones, sino de encontrar una enseñanza, de obtener una sabiduría, de obtener ese regalo, esa perla escondida que está en todo.

Medecine-crow Lakota

En este sentido el “Chamanismo” no es la experiencia de vida, sino es la enseñanza, la “sabiduría” de la vida, lo que nos está regalando el universo, lo que el gran misterio nos ofrece para aprender, todo eso que está entretejiendo nuestra realidad, todos esos hilos energéticos que conforman no solo nuestras experiencias de vida, sino la vida misma y es ahí donde se encuentra la causa subyacente de las cosas.

Es por eso que se habla del mundo de los espíritus, del otro lado del velo, del otro mundo, del mundo de lo desconocido, pero en realidad ese mundo no es que esté en otro lado, en realidad está aquí mismo confluyendo con
nuestra realidad aparente. En esta conjunción la realidad se confunde con ese misterio, ese misterio que es la vida, esa magia que es la vida, pero al ser la parte obscura, el otro lado de la moneda, el otro lado del espejo y una vez que tenemos todas las piezas que conforman un problema o la mayor parte de las piezas del rompecabezas, debemos de evitar intelectualizar las cosas y también evitar buscar una solución y solo hasta ese momento nos hacemos la pregunta obligada “Que es lo que me está enseñando esta situación?

Una vez hecho esto, dejamos de pensar completamente en ello, lo dejamos de lado completamente y dejamos a nuestra sabiduría interna y al universo que nos digan la solución.

Eso es el “Chamanismo” el contacto con el Espíritu, con la causa subyacente de las cosas.

Al buscar en el “conocimiento silencioso” las enseñanzas de la vida, estamos dejando de lado todo tipo de juicios, de lógica, dejamos a un lado la mente racional, la mente “cartesiana”, para preguntarle a la sabiduría universal, a ese contacto que todos tenemos con el Creador-Creadora de todo lo creado para que nos lleve por el mejor camino que convenga a la sincronía universal.

En la Tradición Huichol, no se dice “voy a pensarlo” se dice “voy y estudiarlo”, igual en la ceremonia no se dice que se va a tomar la medicina, sino que se dice “voy a estudiar”.

Sin embargo esto no significa ponerse a sumar o a multiplicar las fases de un problema, sino más bien implica dejarse guiar por la mente de todo lo creado, para que nos muestre la solución.

Ahora bien, como ya dijimos una vez que llevamos a cabo estos pasos, se debe de dejar de lado el problema y dejar de pensar en ello, entonces el Universo se encargará de darnos las solución, pero como?

Ahí está el misterio, ya que la solución puede llegar por medio de un sueño, por medio de las señales de una bandada de pájaros, por medio de una película, por medio de unas nubes en el cielo, con un mensaje cifrado en un periódico, en la misma televisión o escuchando la radio, en fin, las posibilidades del Universo son infinitas de cómo nos puede decir las respuestas.

Y ese es precisamente el camino Chamánico, el entrenar la sensibilidad para reconocer las señales y los mensajes del universo.

Es ahí a donde está el peor de los problemas de la mente “cartesiana”, querer entender todo el proceso, querer dicotomisar todo el proceso, paso a paso, para poder “creer” que la solución es la correcta o que el mensaje es correcto y si nos hacemos muchas preguntas, perderemos la magia de las cosas.

El Padre-Madre eterno tiene maneras infinitas de ponerse en contacto con nosotros, sin embargo somos nosotros lo que no queremos escuchar sus mensajes, ya que debemos de estar silenciosos internamente, para oírlo.

Si en la vida solo estas consiente de todos tus problemas, de la hipoteca, de los problemas del trabajo, de la familia, del dinero, es imposible que puedas escuchar los mensajes de la Divinidad, es como si tuvieras muchas estaciones de radio prendidas al mismo tiempo y al final no entiendes ninguna.

De esta manera te alejas de la Sabiduría interior y el contacto con la Divinidad que hay en todos nosotros.

Eso es el “Chamanismo” sin intentar definirlo, es el camino de vida o una manera de vivir la vida, buscando que el “conocimiento silencioso” nos guie por la vida para estar siempre fluyendo con la Armonía Universal.

Por eso no es una religión, ni un conjunto de creencias, sino es un estado del ser, es el estar conectado con la “fuente de todo lo que es y vivir la plenitud de la vida”.

 

Publicado con amable permiso de Manu « Tlaloc ».